Lo que ocurrió
frente a un hotel de la Capital donde se estaría celebrando un encuentro de Leonel
con empresarios y un periodista internacional.
Debiera
llevarnos a una reflexión profunda.
No se justifica
bajo ninguna circunstancia el atropello de que fue objeto por lo menos parte de
la prensa allí presente.
Pero también es
bueno destacar que no es prudente que si un dirigente político tiene una
actividad, asistan contrarios a boicotearla.
Eso contribuye
a atizar la violencia y puede ser un irrespeto al derecho ajeno, que no conduce
a nada bueno.
Duarte, esq. Agustín Cabral.
Con todos los medicamentos, a buen precio.
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