Hay que someterse voluntariamente.
o No nos queda otra
alternativa, si queremos ser verdaderamente libres y felices.
o Someterse no es
agradable, ya sea que se haga obligatorio o voluntariamente.
o Someterse es aceptar
serenamente la disciplina que me ha de servir para alcanzar un buen carácter,
que es lo único que realmente tiene valor en esta vida y la venidera.
o Es escoger entre varias
opciones desagradables, la que sea menos traumática.
o Es permanecer callados
por que conviene, aunque nos sintamos impulsados a explotar.
o Es ceder serenamente el
paso cuando es a nosotros que legalmente nos corresponde.
o Es hacer más bien de lo
que convencionalmente se ha establecido.
o Si no nos sometemos
sabiamente, seremos sometidos cruel y brutamente en contra de nuestra propia
voluntad.
o Muchos de los no
sometidos voluntariamente parecen estar engrosando una o varias de las
siguientes listas:
o –Drogadictos.
o –Narcotraficantes.
o –Ladrones.
o –Atracadores.
o –Divorciados.
o –Desertores escolares .
o –Cancelados.
o –Encarcelados.
o –Etc, etc, etc.
o El más completo y verdaderamente sabio auto
sometimiento, que lo abarca todo, está registrado en Santiago 4:7, leemos:
o “Someteos, pues a Dios. Resistid al diablo, y el huirá
de vosotros”.
o Más adelante el mismo autor dice:
o “Consideremos felices a los que soportan con
paciencia, las pruebas… Santiago 5:11.
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