Una de las tantas imprudencias que suelen cometerse
con el celular.
o Es la
que se da cuando el celular de la persona con la que dialogamos personalmente
suena y nuestro interlocutor, sin pedirnos permiso, nos deja plantado por largo
rato mientras conversa con el que lo llama.
o Tal escena es extremadamente desagradable, y
muchos la hemos sufrido.
o Lo correcto es que si alguien nos llama y
estamos hablando personalmente con otro, hagamos uso de la prudencia y le
digamos al que llama que nos toque dentro de tantos minutos, de suerte que terminemos con la persona que tenemos en nuestro frente.
o Ahora, si es una llamada de emergencia o de
extraordinaria importancia, que no conviene dejarla para después, pidámosle el
favor al que está con nosotros para que nos permita terminar de hablar con el
que nos llama, o tomar otra medida, mutuamente conveniente.
o Las relaciones humanas se fortalecen y se
mantienen, cuando hay respeto y consideración.
Autor:
Ing. Silvio Peña Jorge.
Celular: 829-214-3413
Digitación:
Lic. Pedro Guzmán,
Correo: mangho35@hotmail.es/gmail.com.
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