INEDITA

Cuidando la apariencia.

o  Un anciano alto dirigente de la iglesia entra al templo.

o  Cumpliendo el protocolo, lo primero que de rigor hace es postrarse de rodilla para orar con el Señor.

o  Luego se dirige hacia el cuarto pastoral para supervisar lo concerniente a la gran sala del templo. Después regresa a la gran sala del templo, y se dirige al banco donde acostumbra sentarse.

o  Estando allí, decide hincarse de nuevo, como si no hubiera orado antes.

o  ¿Por qué ese anciano se arrodilló por segunda vez, cuando lo normal es que se arrodille una sola vez al llegar al templo?

o  Lo hizo así para evitar que los que no lo vieron arrodillarse la primera vez pensaran erróneamente que el llegó al templo y no hizo lo que debe hacer todo seguidor de Cristo al llegar al templo: postrarse de rodillas a hablar con el Señor.

o  En la vida son muchas las cosas que debemos hacer para cuidar la apariencia, para evitar malas interpretaciones.

o  Por ejemplo, si alguien prudente llega a un lugar, en el que se encuentra con un amigo, lo saluda de mano, y varios minutos después vuelve a encontrar esa persona junto con tres amigos más.

o  El señor prudente saluda de mano a los otros 3 amigos, pero también le da la mano al primero que ya había saludado.

o  ¿Por qué lo saluda de nuevo si hacia 3 minutos que lo había saludado?

o  Sencillamente para evitar que los 3 amigos pensaran  equivocadamente que entre el señor prudente y el primer amigo había problemas de relaciones.

o  Otro caso que ilustra es el que se da cuando el señor prudente llega a la casa de una señora casada.

o  Si ella está sola, el no entra, sino que habla con ella en la puerta, y se despide prontamente.

o  Así se evitan comentarios innecesarios.

o No solo debemos ser sabios, debemos parecerlo también.