lunes, 3 de septiembre de 2012

INEDITA

INEDITA

Es triste saber que muchos
Hombres han matado a sus mujeres.
 
Pero ¿y son todos tan culpables
Como aparentar?

o  A continuación presentamos varios casos que nos ayudaran a responder la señalada pregunta:
o  Caso 1: comportamiento sospechoso.
o  Resultó y vino a ser que mientras caminábamos frente a un parque una conocida señora casada, vestida atrevidamente nos pasó por el lado en dirección contraria.
o  Se movía con extraña rapidez, lo cual nos llamó la atención.
o  La distinguida dama, yendo por la orilla de dicho lugar público, por una zona que no era camino a casa, atravesó hasta llegar a la otra calle.
o  Nos llamó tanto la atención este comportamiento anormal, que ya a cierta distancia de una manera discreta, miramos hacia atrás,
o  Y allí vimos a la señora montarse en un motor con alguien que no parecía ser su esposo.
o  El motor arrancó, y se vio dando la impresión de que iba a circular por la calle donde inicialmente nos encontramos con la señora.
o  ¿hacia dónde fueron? No lo sabemos.
o  ¿estará esa dama por los caminos de la infidelidad?
o  No tenemos suficiente datos para responder a esa pregunta.
o  Esto puede ser una simple apariencia, como también puede ser el reflejo de una lamentable realidad.
o  Tomando en cuenta el alto índice de violencia que existe en nuestra sociedad, debiera haber una institución, ya sea gubernamental o civil, o mixta, con autorización para investigar y ayudar ante caso como el que hemos descrito, a fin de determinar si dicha dama anda en caminos de muerte, es decir, averiguar si le está siendo infiel a su esposo, y de ser cierto, utilizar los recursos necesarios que la ayuden  a desistir de esa conducta, ya que existiría la posibilidad de que su esposo llegue a enterarse, lo cual podría provocar un ataque de celos tan grande que llegue al extremo de decidir contra la vida de ella, y quién sabe si de otras personas más.
 
o  Caso 2:
o  Un hombre picotea a otro bajo un fuete ataque de celos.
o  Aunque no recordamos ni el lugar ni la fecha precisos, la presente historia la aceptamos como cierta en el momento que se nos contó.
o  Es un evento registrado en una zona campesina de RD.
o  Resultó y vino a ser que un señor solía salir (posiblemente los domingos por la tardecita) a trabajar fuera de su comunidad con el objetivo de ganar la comida para su familia. Luego regresaba en el fin de semana siguiente y así sucesivamente.
o  En una ocasión, como siempre el hombre se despidió de su amada mujer, y después de cierta distancia decidió devolverse.
o  Cuando llegó a su casa, la esposa sale rápidamente a encontrarse con su marido, y le dice que fueran a llevar el caballo a la cerca.
o  La mujer hacia eso para dar facilidad de que se fuera un amante que tenía en su aposento.
o  El matrimonio regresó a la casa y se acostaron. En cierto momento, el esposo siente que algo se movía debajo de la cama, por lo que se agachó a mirar, y ¿Qué vio?
o  Vio a un hombre, e inmediatamente saco su machete y picoteo a dicho hombre.
o  Y a la mujer también le cayó a machetazos, la que se cree salvó la vida milagrosamente.
o  En dicha historia ¿Quién es culpable? ¿el marido? ¿la mujer? ¿el hombre extraño? ¿varios? o ¿todos a la vez?
o  Y la principal víctima ¿Quién es?
o  Creemos que en el fondo, la principal víctima es el esposo, pues sus acciones desenfrenadas fueron producto de las imprudencias cometidas por su esposa y su cruel amante.
o  En lo que parece ser relacionado con este tema, leamos la siguiente cita bíblica que está en Proverbios 6:32-35.
o  “Pero el que comete adulterio es falto de juicio; el tal se destruye a sí mismo. Plaga y vergüenza hallará, y su afrenta nunca se borrará.
o  Porque los celos enfurecen al esposo, no hallará perdón en el día de la venganza.
o  No aceptará ningún desagravio, ni se apaciguará, aunque multiplique los dones”

Observación:

¡Quiera el Señor, que en el nombre de nuestro amado Maestro  Jesucristo todos podamos  entender todo el mensaje que comprende el presente tema.

Y que nuestras decisiones sean siempre las que el ponga en nuestros corazones! ¡Amén!

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